Aconsejadme: Los amiguitos y la comida basura
Hoy no escribo para daros consejos sino para pedirlos. Espero no ofender a nadie con esta entrada, porque mi intención sincera es solucionar un pequeño problema... con vuestra ayuda. Desde que mi hija comenzó a salir a jugar con otros niños siempre acabo teniendo el mismo dilema: la mayoría de los otros niños del parque, o de amigos etc bebe refrescos, come galletas industriales, chips, caramelos, gominolas, chocolate... en fin, todas esas cosas que en mi casa no nos gustan nada pero que al parecer tienen mucho éxito entre algunos de los padres que conozco (que son, por lo demás unas personas maravillosas).
Estoy hasta el gorro de los Lacasitos y gominolas de los vecinos. |
¡Qué dilema!
Yo no quiero que mi hija coma ese tipo de cosas, ya que a un niño de uno o dos años le da absolutamente igual merendar fresas o Lacasitos. Pero si los demás tienen ella también quiere, ya sean manzanas o bombones. No es cosa mía lo que hagan los demás, aunque me parece una irresponsabilidad el permitir que niños tan pequeños consuman algo que no les aporta nada más que calorías vacías, con la excusa de que lo hacen "de vez en cuando". Pero ese de vez en cuando acaba siendo tres, cuatro o siete veces a la semana, y además a mí no me ayuda porque hoy es Jaimito y mañana es Pepita la que se trae refrescos y gominolas al parque y nos las ofrece, así que al final mi hija se encuentra con estas cosas a diario. Este tipo de meriendas crean malos hábitos y acostumbran a los niños a tomar alimentos excesivamente salados o dulces, de modo que la comida normal (sea pasta, verdura o fruta) se vuelve mucho menos atractiva. Luego los padres se extrañan de que sus hijos coman poco o no quieran verdura. Aparte de estar demostrado que todo esto es nocivo para la salud. Lo que peor me sienta es que me digan: "pero si a ti te criaron así, y no te pasó nada". ¡Mentiraaaa!
¿Por qué los niños no pueden beber agua en el parque? |
Por supuesto que quiero que mi hija se socialice y juegue con otros niños pero, ¿cómo explicar a los otros padres (y niños, y a ella) que las galletas/bebidas/lacasitos que le ofrecen a mi hija no me gustan nada? ¿Cómo decírselo sin ofenderlos ni meterme en debates acerca de quién es buen o mal padre? Sinceramente, respeto que cada uno haga lo que quiera, pero si afecta a mi hija considero que no está bien que me quede callada. Al fin y al cabo yo no voy por ahí ofreciendo algas y tofu a los niños de los demás... o diciéndoles "que las prueben, que por una vez no pasa nada".
¡Contadme! ¿Qué hacéis vosotros para salir del paso sin agraviar a nadie? ¿Tenéis alguna técnica secreta? ¿Pasáis de todo y dejáis que se coman lo que les den? No estoy hablando aquí de comer vegetariano, sólo de cómo evitar que le endosen a mi hija comida basura en el parque y en casa de sus amigos sin ser ofensiva con gente que es amable con nosotros y tiene buenas intenciones (pero que no tiene muchos conocimientos de nutrición). Si alguna vez he dicho algo siempre me miran mal, me critican por ser demasiado estricta, etc. Y todo eso diciéndolo de forma muy educada y sin meterme con nadie. Parece que si le das Coca Lola a tus niños eres un padre "guay" y socialmente aceptable, y en cambio si te parece mal eres una amargada, peor que la Señorita Rottenmeier. ¡Esto es el mundo al revés! En fin, yo ya no sé qué hacer... help!
Buff, difícil situación. Yo no soy madre, pero si hermana mayor (con diferencia de 15 años), prima de 5 preciosos pequeñuelos y madrina. Y en cuanto alimentación pienso como tú, no por la parte vegetariana, jeje. Yo he llegado a ver a padres que les dan bebidas energéticas tipo Red Bull a sus hijos!!! que juraría que en la lata pone que no es aconsejable para niños, pero bueno, luego se quejaran que son hiperactivos... No sé, hablando se entiende la gente no? o se supone, pero creo que a veces no.... que difícil lo tienes, vaya.
ResponderEliminarHala lo del Red Bull todavía no lo he visto... qué fuerte. Lo de hablar sí, claro, es una opción, pero a veces es difícil no ofender a alguien diciéndole "es que el Red Bull es malo para los niños...".
EliminarDifícil situación. Yo siempre pienso lo mismo. Antes había 15 niños por familia, que se criaban solos y comiendo solos, vete a saber que y no pasaba nada. Creo que cada generación que pasa, somos más exagerados, y me incluiré en ese saco cuando sea madre, lo sé! Jejeje. Pero de momento pienso que somos reeeeeexagerados! Antes era todo mucho más descuidado, y han/hemos crecido y vivido igual.
ResponderEliminarPor otra parte, entiendo y respeto que cada uno en su casa hace lo que quiere. Entonces, lo que creo que es mejor, es hacerle entender a ella lo que pensais, y que sea ella la que decida si quiere o no quiere. Está claro que hablamos de una niña y de golosinas. Pero peores cosas se han visto. Me refiero a que, hay niños que parecen grandes y entienden las cosas. Planteaselo! :D
Entienden las cosas a secas no, entienden las cosas mejor de lo que creemos que las van a entender! Ahora si! Jajajajaja
EliminarUn besote!!!!
Gracias Tatiana. Es verdad, antes los niños iban más a la suya sin padres vigilando todo el día, pero también es verdad que entonces no había muchas de las cosas que hay hoy, ni había medios para comprarlas: si había caramelos era por un cumpleaños, y no todos los días...
EliminarEs un tema complicado y siento no poder ayudarte, pero estaré atenta a las respuestas de este post porque me parece un tema a debatir, realmente.
ResponderEliminarPor un lado, está el grado de socialización, y , por otro, la alimentación sana, y de alguna forma deberían aprender a convivir.
De todas formas, creo que los niños son muy inteligentes y todo es hablar con ellos y llegar a acuerdos. Quizá sea cuestión de decirle, por ejemplo, que sólo puede tomar una "guarrería" por semana y pequeña como mucho (4 o 5 lacasitos, una gominola,...algo así)
A nivel salud, por otro lado, no sé hasta qué punto es buena una dieta totalmente "sana", y no me entiendas mal, que yo abogo por ellas, pero, el cuerpo necesita estímulos para reaccionar de vez en cuando, y si nunca ha ingerido determinados alimentos, quizá llegue un dia en que le genere una debilidad por no crear una resistencia (como el tema de las enfermedades y los anticuerpos, vaya) y coma algo que no sepa que lleva X ingrediente y se ponga malísima (porque un día crecerá, y será adolescente, y ahí sí que no la vas a poder controlar en ese aspecto)
Tampoco es cuestión de estarlo sometiendo constantemente a estímulos, pero sí ver, de vez en cuando cómo reacciona, para que ella misma se dé cuenta de que hay seudoalimentos que no le sientan bien y sea ella misma quien los rechace.
Repito que es un tema ambiguo y delicado y que estamos dando palos de ciego en cierto sentido, pero el ensayo-error sigue siendo el méodo científico más usado ;)
Suerte!!
Gracias por la idea, es verdad que hay que hablar con los niños y me gusta tu idea de llegar a un acuerdo con ellos (1 por semana, o 4 por semana, o lo que sea...)
EliminarEs difícil el tema, porque no puedes hacer que el resto de los padres no les den a sus hijos esas guarrerías, pero creo que no pasa nada por decir que no, que tu hija no toma esas cosas. No es cuestión de que el resto no se los dé a sus hijos, pero tu hija es tuya y come lo que tú consideras conveniente. Los míos son poco de golosinas (salvo uno de los gemelos, que de vez en cuando come gominolas), pero el otro día, en el mercado, a la niña (2 años) le dieron una piruleta y se la abrieron para que la chupara. Ahí es difícil decir que no en la cara de la persona, pero en cuanto nos dimos la vuelta se la quité... Otras veces cuando me preguntan, digo que no directamente, porque es muy pequeña, o porque va a cenar pronto o porque no le gustan (así evito que insistan).
ResponderEliminarAh, y sobre las críticas, ahora es por la comida, pero en unos años será porque no la dejas que se ponga la camiseta mega-corta o porque tiene que llegar a casa antes que sus amigas... Es lo que toca cuando eres madre, que no todo el mundo comparte tu opinión o tu forma de educarles...
Animo!
¿Y cómo le quitas la piruleta sin que se enfade?
EliminarLo de las críticas, ya, supongo que esto no tiene fin...
Gracias y un besito.
Ola!
ResponderEliminarYo aùn no tengo peques pero esta duda ya me la ido planteando desde que he comenzado a darme realmente cuenta de todo lo que la industria nos vende y nos va gravando la salud pizquita a pizquita.
Me da rabia/pena que nos consideren radicales, cuando lo radical es dar gelatinas con aspartamo, azùcar, conservantes, colorantes, etc... . Siento no poder darte ningùn consejo ùtil, tan solo mi apoyo y agradecimiento por todo lo que haces en este blog.
Por si acaso no lo conoces, una francesa Corinne Gouget a escrito un librito sobre conservantes y colorantes y las posibles consecuencias. Es màs que nada pràctico para leer las etiquetas. También ha hecho varios videos en internet y uno sobre las gominolas:
https://www.youtube.com/watch?v=j0W1mVhl5Hc
:)
Un saludo y bravo!
Eso mismo digo yo, por qué los radicales somos los que no queremos darles conservantes y colorantes rebozados en azúcar...
EliminarMuchas gracias por la recomendación, lo miraré. Un abrazo.
Hola. Me puse a contestarte aquí, empecé a irme por la ramas y decidí escribir un post contestándote en mi blog jajajaja aquí lo tienes:
ResponderEliminarhttp://mamisenelcolegio.blogspot.com.es/2014/05/el-consultorio-de-la-tia-prisca.html
¡El consultorio de Prisca! Ahora me pongo a leerlo :)))
Eliminaryo no sé qué decirte porque no soy madre, pero está claro que lo mejor para ellos es acostumbrarles desde pequeños a una comida sana, pero cómo hacerlo si el resto de padres "no ayudan" y la niña tiene tentaciones diariamente al ver a los demás? además, basta que se los niegues para que los quiera, que es lo que suele pasar...
ResponderEliminarTeresa Quiroga Blog
Sí, eso me pregunto yo... es difícil la cosa!! :**
Eliminarla mejor opción de salir del paso sin ofender , es decir que es alergica y listo nadie nadie le dará nada por temor de que se ponga malita .
ResponderEliminarNo es mala idea, pero me da cosilla decir eso porque hay gente que sí que es alérgica y no sé si está del todo bien. Pero como opción extrema es buena idea ;)
EliminarTema complicado... Yo con la mayor lo que hago es decir "No gracias, hoy ya ha comido dulce" y cosas así. Si eres educada no vas a ofender a nadie, y oye, si alguien se lo toma mal o te toma por amargada, es su problema. Es más importante tu hija que unas amistades pasajeras. Sus hijas acabarán siendo gorditas y con las venas llenas de porquería, y la tuya no, gracias a tu constancia. Porque lo fácil es dar las golosinas, y velar por una buena alimentación de los hijos es difícil y a veces agotador.
ResponderEliminarYo otra cosa que hago es no darle dulces en casa, así si los come fuera al menos no es una ración extra, sino única. Y es importante dar buen ejemplo en casa de hábitos alimenticios sanos, para que cuando crezcan y nadie les controle, elijan comer de manera equilibrada.
Con el pequeño aún no tengo ese problema, pero no creo que tarde la gente en empezar a ofrecerle guarradas. Y con el tema zumos tengo al enemigo en casa, porque mi marido nunca bebe agua y quiere que los niños beban zumos de brick con las comidas. Que no tienen nada malo, pero con caaada comida? Para mi un zumito es una excepción, pero el agua es la bebida principal del ser humano, las demás deben ser un extra.
Me gusta eso de "hoy ya ha comido dulce", es algo que la gente puede entender. A mí me cuesta a veces darme cuenta de que no es tan importante la opinión de la gente (que a lo mejor ni siquiera volveré a ver).
EliminarEn casa no tenemos casi dulces, al menos eso lo hacemos bien ;)
Yo con el zumo hago igual, procuro que sea una excepción. A la niña se lo rebajo con agua si se empeña en que quiere...
Ah, lo olvidaba! Otra cosa que hago con la mayor es darle algo de comer antes de cualquier situación que incluya peligro de guarrerías. Si no tiene hambre está menos inclinada a comer gominolas o lo que sea.
ResponderEliminarBuena idea!!
EliminarUff, yo tengo el mismo problema, y encima pareces tu la rata que nunca llevas chucherias para compartir, mi solución és darle a la niña antes de salir o en la misma entrada de casa trocitos de queso, o de fruta, nos damos una vuelta y cuando llegamos al parque y le ofrecen ganchitos o demás, ella misma lo rechaza. Tiene 2 añitos, me funciona.
ResponderEliminarMuy buena idea, así es más difícil que quiera comer lo que le ofrezcan!! Y sí, si no tienes basurilla para dar luego quedas como una tacaña que nunca lleva nada para ofrecer...
Eliminaryo, antes de prohibirle la comida basura restringiría directamente todo lo que venga de un desconocido. O le dices a los padres que por favor no le ofrezcan nada o lo tomas, lo agradeces y le das otra cosa diciéndole que ya lo comerá en casa, luego en casa lo echas a la basura, fin.
ResponderEliminareso o inventarte que tiene alergia a algo, pero es feo jugar con las enfermedades.
Suerte!
Muy buenas ideas! Aunque no me sirve si voy de visita a casa de *conocidos" :)))
EliminarLo de la alergia ya lo he pensado, pero como dices me parece un poco injusto para los que la tienen...
Hola es difícil luchar contra la corriente, me parece que cuando ofrezcan un caramelo, lo acepte y diga "lo comeré después de la merienda", o después del almuerzo o de la cena.
ResponderEliminarLleva de tus dulces como las bolitas que nos mostraste el otro día y hagan un intercambio, podrían llegar a llamarse las pastillas antídotos jajaja.
El tema de las alergias puede ser una buena disculpa, pero es una mentira y una afirmación que puede grabarse en el subconsciente de tu niña.
En mi caso a mis dos niñas no les di nunca en casa algo que yo considerara dañino, no las obligue a ser vegetarianas, pero afuera en la escuela era bien difícil que no compraran una golosina, ahora que son adultas (29 y 35), saben muy bien la diferencia entre alimentase bien y mal, pero ellas tienen la última palabra, una de ellas se apega más la comida saludable y la otra nada de nada, yo las dejo, es su elección, no te agobies, no temas por ella, en el parque que diga "uno para después", uno no es ninguno además después se olvida y desaparece jeje,
espero que te vaya bien y que te hayamos podido ayudar en algo, besitos
Muchas gracias por tu comentario y por contar tu ejemplo. Es buena idea lo de llevar mis propias cositas y así ir preparada si nos ofrecen algo para "contraatacar"!! :))
EliminarUn besito!!
buenooooooooooo.... casi nada el tema.... a ver, para empezar ya sabes que nosotros no somos vegetarianos, pero en esto como en todo deberia prevalecer el vive y deja vivir, repetar a los demas y que los demas te respeten a ti... lamentablemente no es asi, y no solo pasa con la alimentacion, o entras en la "rueda, sociedad capitalista, comida basura, musica de moda, ropa,,, da igual" o date por jodida.... y como dicen en un programa de la tv local de risa, unos muñecos..." te van a joder iguaaaaaaaaaaaaaaal... asi que , cantaaaaaaaaa, cantaaaaa chaval" vivimos en sociedad y los que en algun aspectos destacamos o pensamos diferente.. ya somos los raros y nos miran mal.... yo de pequeño a mi hijo no le he dado potitos, ni chuches,,, y he evitado en lo posible la comida basura,, etc... ahora, con 8 años su mayor ilusion es comer o cenar en un Macdonalds o similar.... y mira que le digo... pues yo compro la carne y por lo menos son caseras.. pues nada, no hay manera, quieren ir a esos sitios para mi horrible, y beber coca.cola, y que les den una mierda de juguete al que luego no le hacen puto caso... tu haz lo que te dicte tu conciencia... pero es inevitable, y tarde o temprano.... caeran.... besicosssssss y como te entiendo !!
ResponderEliminarAy... si es que eso es lo que todos me dicen, que si no se lo das luego es lo que más quieren (como tu hijo con el McDonalds). Aunque a mí tampoco me dieron nunca nada de eso, y una vez siendo adolescente fui a McDonalds por fin y me pareció malísimo :))
EliminarGracias Guecica y te entiendo yo también!!
Me parece un debate muy interesante... Yo experiencia no puedo aportar que no tengo, pero me quedo a leer todo lo que te dicen a ti!
ResponderEliminarPues sí, la de ideas que nos están dando!!
EliminarHola Arándana, entiendo muy bien tu enorme problema. Yo no tengo hijos pero conozco familias veganas con niños y puedo opinar desde "la barrera", que se ven a veces las cosas de otra manera.
ResponderEliminarPor una parte leo propuestas de decir a los otros padres que la niña es alérgica. Es la forma mas fácil de que dejen de ofrecerle porquerías. Mi sobrino (que ahora tiene 10 años) tiene una alergia muy fuerte a los lacteos. Los otros padres y el colegio lo saben y miran que lo que le dan no tenga leche, pero de todas formas de vez en cuando se cuela algo y el pobre niño se echa a morir. Esto impresiona a todos y cuidan mucho de que no vuelva a pasar. El niño se ha acostumbrado a preguntar, para él es algo normal, aunque vea que los otros niños no preguntan y que él en ese aspecto es diferente, pero para él no es ningún trauma, porque lo hace desde que tiene uso de razón. Pero tu caso es distinto, tu niña está sana, y no me parece bien la escusa de la alergia u otra enfermedad. En eso estoy de acuerdo con Pilar Bazan.
Hablar con los demás padres es difícil porque no entienden lo que les dices, es como con el veganismo, la inmensa mayoría ha oído hablar de lo perjudicial que es el consumo de azúcar, de grasas saturadas (frecuentes en las chucherías), de carne e incluso de los lacteos, pero los siguen consumiendo porque "no entienden", si lo entendieran no podrían seguir usándolos. Es algo que no se puede explicar con la razón, no se trata de entender con la cabeza, sino algo interior, que es lo que nos mueve a muchos a hacer las cosas de otra manera, a sabiendas de que la sociedad va por otro camino (el camino fácil, por ser el que sigue la mayoría). Por eso es difícil tratar el tema con los padres y que lo entiendan. Esto no significa que no lo intentes, pero hay que ir con mucho cuidado para que no te pongan etiquetas (aunque no es malo lo de las etiquetas, pero siempre que correspondan con la realidad y estén libres de prejuicios). Es posible que haya padres que incluso te admiren, pero no se atrevan a dar el paso. Si podéis uniros ya seréis más y dejarás de ser el "bicho raro , intransigente y espartano". (Sigo en el siguiente comentario, porque al ser tan largo no cabe en uno).
Es que es eso: decir que es alergia me parece un poco mal...
EliminarY hacer entender a la gente me parece imposible (que al fin y al cabo no soy Jesucristo ni tengo ningunas ganas de ir por ahí predicando!!).
Yo trataría de concienciar a la niña (lo mismo que los niños con alergias se conciencian de su enfermedad y son consecuentes y preguntan), pero fomentando su autoestima para que sepa defender ante otros niños su postura, así no tendrá necesidad de sentirse discriminada ni diferente (todos somos diferentes, pero unos más que otros. Como decía George Orwell en "La granja de los animales": "todos somos iguales, pero unos son más iguales que otros" ;-)), o mejor dicho, diferente sí, ya que cada uno de nosotros somos individuos únicos, pero desde es respeto a esa "unicacidad" o como se diga. En toda familia debe haber unas normas de disciplina, y yo veo en mi hermana (que no es vegetariana y además deja que los niños coman chucherías, pero con moderación) que es posible poner límites, decir "ahora no" y "por hoy es suficiente", incluso tienen una tabla de conducta y apuntan si han hecho las tareas, si han hecho algo malo (definiendo lo que significa "malo"), si deben recibir una recompensa o un castigo, y lo hacen de común acuerdo, todo es cuestión de la educación que se les dé. Si se hace desde pequeñitos es mucho más fácil, porque lo ven como algo normal.
ResponderEliminarTambién dejaría a la niña probar algunas de esas cosas, más que nada para que no se cree en ella la necesidad de ir contra una prohibición. Si la educas en la conciencia de lo que es sano y lo que es justo, creo que ella aprenderá a discernir (te hablo de que veo en familias de amigos veganos) y si por lo que sea come alguna de esas porquerías puedes hablar con ella sobre la experiencia (por supuesto adaptándote a su edad). La propuesta de Pilar Bazan de llevar dulces propios y hacer un intercambio también me parece interesante. Los niños son curiosos por naturaleza y les gustan los juegos, podrías hacer una especie de taller "encubierto" ofreciendo juegos en una fiesta de cumpleaños en los que los niños hagan chucherías, o incluso esto sí que lo podrías hablar con otros padres, y uniros para hacerlo juntos, algo así como un taller para aprender a hacer chucherías sanas. No todos van a estar de acuerdo, pero estoy segura de que habrá algunos interesados.
Bueno, me he enrollado de lo lindo, pero es que es un tema muy interesante, aparte de complicado. Espero no haberte liado mucho. Con tantas opiniones ahora tendrás que apuntar las que te "digan algo" y ver cómo las puedes llevar a cabo, esto es lo más difícil, pero creo que no te asustan los retos, verdad? ;-). Un beso muy grande y mucha suerte y fuerza.
Genial la frase de Orwell :)
EliminarClaro que le dejo que pruebe de vez en cuando, para que no se convierta en un misterio y en algo demasiado interesante. Con lo de la carne y los fiambres si que le digo que no. ¿Qué hacen tus amigos veganos? ¿Les dejan también comer bocatas de jamón en los cumples...? Es que no sé...
Un beso y gracias.
Me he quedado bastante alucinada, he leído la entrada de http://mamisenelcolegio.blogspot.com.es/2014/05/el-consultorio-de-la-tia-prisca.html y me ha llamado la atención el post, pero cuando he leído de uno o dos años.... me parece increíble... en mi casa comemos de todo, a mi hija la mayor de cinco años desde pequeña le encanta el tomate, los tipo cherry se los comía que daba gusto y había gente que se quedaba extrañada ¿come tomate tan pequeña? Pues sí, y ahora le encanta el brócoli(cosa que también asombra). La pequeña que tiene tres años ha salido con otros gustos, le gustan las chuches y el chocolate, y han tenido las dos la misma educación, pero aún con esos gustos sabe que solo puede comerlos en fin de semana y sin pasarse.
ResponderEliminarSi es entre semana y alguien les ofrece, normalmente me preguntan y no tengo ningún reparo en decirles que no, que sino luego no cenan o no comen.
Pero con un año o dos, pocas chuches han comido.
Creo no somos mejores o peores padres por dejarles comer chuches, pero sí que deberíamos ser consecuentes con nuestras convicciones, si educamos a nuestros hijos conforme pensamos que es lo mejor para ellos y nos equivocamos, siempre sabremos que lo hemos hecho porque pensábamos que era lo mejor para ellos, sin embargo si lo hacemos sólo porque hay mas gente que lo hace así y va en contra de lo que pensamos que es lo mejor... nunca llegaremos a sentirnos bien, ni estaremos seguros en nuestras decisiones.
Lo mejor creo que es que creas en tus principios, cada persona somos de una manera, ninguna somos perfecta y todas somos diferentes.
Muy bien por tu hija la mayor! Que siga así :))
EliminarYo tampoco digo que uno sea mejor o peor padre, sólo que dejen a cada cual hacer como mejor le parezca sin juzgar.
Gracias y un abrazo!
Te entiendo perfectamente, a mi me pasaba lo mismo. No me gusta que la niña coma ciercas cosas, especialmente las gominolas, azúcar cancerigeno con colorantes industriales... Buf!!!
ResponderEliminarLa cosa es poder mantener un equilibrio. Si algún día le ofrecen un caramelo, le digo - Te lo guardo para después- el después nunca llega, ya que ella se olvida, por suerte, y yo lo tiro a la basura.
Otra opción es que si le ofrecen un donete o unas patatitas fritas de bolsa, no me niego, ya que ella debe socializarse, y es un modo necesario para que lo haga, ya que el otro niño ve que es como ella. Si voy yo, y le digo, -No!! Es que la Daphne no come estas cosas!!!- El padre se ofende y el niño no entiende, pensara que mi hija es diferente y rara. Así que hay que estar atenta y mantener el equilibrio. Naturalmente no voy a dejar que esté todo el rato picoteando, en ese caso se le dice, tu tienes tu merienda, hay que hacerselo entenender desde muy peque, la mia lo asimiló rápido.
Otra opción, que es la que practico a veces, es no llevarla tan amenudo al parque. No es algo malo, mi madre nunca me llevo en la vida al parque y yo he salido 100% social. Creo que tiene que haber un equilibrio y el niño debe saber entretenerse cuando está en casa. Mi hija lo lleva muy bien, se ha creado su mundo de imaginación, los días que no va al parque. Besitos
Me encanta eso de "te lo guardo para después" :)) Lo de ir menos al parque es una opción, también he pensado en ir a parques menos concurridos :) Besitos.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarReceta para chuche sana; Solo lo he hecho con piña y ahora se pasa el invierno pero ... la comparto. Con otras frutas seguro que se pueden hacer igual; hago láminas finas de la piña como de un centímetro, les quito la corteza obviamente, y las coloco en un lámina de papel de horno suficiente para que las cubra por ambos lados y con dos pinzas de la ropa las cuelgo de los radiadores de casa para deshidratarla. Os aseguro que no hay niño ni adulto que se resista a comerlas una vez las prueba. Imagino que con naranja, kiwi, .. quedarán igual de bien. Lo descubrí tarde este invierno para hacer más pruebas, lo haré el invierno que viene o se podría usar el horno a baja temperatura, un secadero solar casero (que estoy pensando en armar) sería una opción más barata y ecologica e ir haciendo acopio de estas chuches y otros productos cuando estamos en temporada claro. ¡Conchos! ¡ Estoy pensando en fresas deshidratadas! ¡Lo tengo que hacer con el secadero solar!
ResponderEliminarLa mía come chuches los findes, aunque no todos. Y cuando vamos a comprar a la tienda le digo que solo 5. Normalmente se compra 4 chicles y una gominola o algo así.
ResponderEliminarA mí también me gustan y mucho, aunque ya no compro tantas como hace años más que nada porque tampoco quiero que ella coma demasiadas.
Siempre me ha dado como cosa prohibirle las chuches así que decidí que serían pocas y en momentos puntuales.
También veo el caso de una niña de su clase y su hermana a las que nunca les dan chuches y cada vez que ven a algún niño con una bolsa van a pedírselas, sus padres no les dejan, les ofrecen otras cosas pero no quieren, quieren las chuches y acaban llorando. Sus padres les explican que son malos para los dientes y demás pero ellas quieren comerlas porque ven que los demás niños/as las comen.
Yo si tenemos chuches y hay más niños delante suelo preguntar a los padres a ver si pueden comerlas porque soy consciente de que algunos no quieren que las coman y me parece totalmente respetable.
A mí me parece bien que cada uno haga lo que quiera, al fin y al cabo tú les preguntas primero.
EliminarJurl, me alegra no vivir estos dilemas en primera persona.... Se me ocurre, si siempre comparte merienda con los mismos nenes, intentar organizarte con sus progenitores y acordar entre todxs un cuadrante semanal de merienda, para que merienden lo mismo y tengan variedad. Así puedes intentar llevártelos a tu terreno ;)
ResponderEliminarNo es mala idea :))
Eliminarvaya es complicado si, yo no tengo hijos pero si una sobrina y siento reconocer que come guarrerías. Está en edad escolar ya, va para 6 años, y lo máximo es controlarle el consumo, un poquito un día no hace daño, y que coma bien en casa para que no se antoje luego. También me parece muy importante explicarle y hacerle comprender sobre la alimentación, lo bueno y lo no tan bueno.
ResponderEliminarEspero lo estés llevando mejor :)
besos!
Gracias Sabrina por tu comentario y por contar tu experiencia :)
EliminarAy, te entiendo, yo empiezo a experimentar lo mismo con mi hijo, que tiene año y medio. De momento sólo le han ofrecido gusanitos, yo también le doy en casa a veces, aunque me da pena hacerlo porque al final, como tú dices, si le saco fresas también se las habría comido. Pero en el parque sí hay niños que comen chupachups, y yo no quiero ni que los pruebe. Generalmente no llevo nada, salvo palitos de pan o galletas, que me parecen más sanos, aunque vete a saber.
ResponderEliminarEl problema es el padre, que es un loco de estas porquerías y siempre compra bolsas de gominolas. Seguro que acaba dándole a escondidas. ¡Un día le dio a que chupara un poco de flash! o sea, colorante congelado, o un jamón de chuchería, uf. Y el crío tan feliz. Estoy alargando los meses para que coma porquerías cuanto más tarde mejor, incluidos los helados. A ver lo que duramos.
Así que, como ves, estoy en tu lucha. Si encuentro una fórmula mágica, te la cuento :-)
Pues lo dicho, si encuentras la fórmula vuelve y me la cuentas!!
EliminarPrimeramente decirte que ya no se que hacer para recibir las actualizaciones del blog, no hay manera :/ hasta que no me acuerdo de entrar directamente en la página no me entero... maldito blogger ¬¬
ResponderEliminarY ahora a lo que iba, yo tampoco soy madre ni creo que te pueda ayudar mucho en ese sentido. Pero te entiendo a la perfección, las/os que no llevamos el estilo de vida de la mayoría solemos ser unos incomprendidos, se le va a hacer...
Este caso es un poco complicadillo porque afecta también a la socialización de tus hijos y es lógico que te preocupe, pero sinceramente si tú crees que haces lo mejor no pienso que te deba importar lo que crean y digan de ti. Pero siendo sincera a mi también me cuesta bastante que no me afecte la opinión de los demás. Así que en este caso, y como te han dicho en algún comentario, yo optaría por hablar primero con tú hija e intentar hacerle entender que no es sano comer a menudo esas cosas, y que es mejor que no las acepte.
Aún y eso es una niña así que igual no funciona, en ese caso yo hablaría con los padres y les diría algo así como que a tú hija no le sientan bien las golosinas por lo que no puede comerlas, y me imagino que con eso ya tendrán un poco de cuidado con lo que le ofrecen los niños...
Es lo único que se me ocurre! ya que se trata de un tema de salud tampoco les estás mintiendo ;)
No te preocupes, a mí también me pasan cosas raras con Blogger...
EliminarLa verdad es que a nadie le pueden sentar bien las golosinas, en todo caso puede ser que no noten nada especial, pero sanas seguro que no son... (me han llegado a decir "déjala, que los niños NECESITAN el azúcar"!)
A ver. Enfocar este tema por la socialización es muy delicado. Beber alcohol es también muy social y en propia carne he vivido lo que implica no probar ni gota por simple elección. Es como ser vegano e ir a una mariscada por conservar a las amistades. Mira, no. Al final, o cambias de amigos, o ves a los que no te respetan sólo en contextos ajenos al comer/beber, o llegando cuando ya ha pasado la tormenta. Batallar todo el día es cansino.
ResponderEliminarEl tema niños es de cuidado porque está en juego su salud, pero también su libertad. Está claro que con dos años no son conscientes y necesitan un guía y protector, pero la prohibición, incluso con argumentos, puede tentarles, por lo que aquí es cuestión de tratar el tema entre adultos, cuando el niño no escuche: "Te agradezco el detalle, pero prefiero que no ofrezcas gominolas a mi hijo". Algunos nutricionistas defienden la máxima del "No negar (si cae en sus manos), no ofrecer", pero, como digo, es un tema de cuidado, pues (para mí) una única gominola puede desencadenar una futura adicción (¿o acaso ofrecemos un cigarro a los adolescentes para que sepan lo que es y se integren?); sin embargo, ¿por qué prohibo a mi hijo un filete de pollo, si la vegana soy yo?
Nuestro propio ejemplo es el principal motor educacional que tenemos, pero no deberíamos imponerles ninguna ideología. Es su camino. Creo que sólo resta protegerlos de lo que no nos gusta mientras no tengan suficientes recursos para decidir. Quiero pensar que hay más padres sanos por los parques, coño.
Tienes razón con lo de dar ejemplo, al fin y al cabo los niños lo copian todo. Yo no lo hago en plan ideología, mis intenciones son buenas (si no me gusta para mí, tampoco para mis hijos, ¿no?). Lo de los padres por los parques... pues de todo hay. En general son todos majos (simpáticos). Pero lo de la comida y alguna otra cosilla... pues cada cual tiene sus particularidades.
EliminarHola Arándana!!! qué tema!!! Yo no soy mamá pero te doy mi opinión como docente y como tía. Prohibirles que coman cualquier cosa, lo que sea, es complicado porque lo prohibido siempre se desea, y además puede generarles conflictos internos y de sociabilidad (sentirse "distintos"). Creo que va más por esto de llevarlos medio con la panza llena, y promover en casa los hábitos que consideres, ya que si para tus hijos lo normal es comer fruta, por más que acepten algunos caramelos de sus amigos, no les va a cambiar el cotidiano. Esos sí, los adultos (abuelos, vecinos, etc), es otra cosa, ellos DEBEN aceptar los hábitos que vos decidís para su crianza. Si el vecino les da un caramelo, de buena onda, cuando los veas sin tus niños les decís que disculpen, pero que no va con vos. Y si no les gusta, pues no son tan buenos!!! Cada quién cría a sus hijos con sus reglas.
ResponderEliminarYo soy tía y tía postiza de niños criados desde el fundamentalismo más acérrimo, hasta casi exclusivamente en Mc Donalds... a cada quién le respeto su estilo, es lo que corresponde, a algunos sobris los llevo a comer hamburguesas porque es lo que conocen, les mostraron y les gusta, y no les digo lo que deben hacer, y a otros les cocino con semillas y nunca jamás les llevo golosinas... RESPETO a cada quién, ¿quién soy yo para decirles si son buenos criando a sus hijos?
Te recomiendo de todos modos que para que los demás entiendan y aprendan a convivir así como vos con ellos, que lleves fruta de más, tofu de más, que convides si te lo permiten, porque sé de mamás que por vergüenza les dan la manzana a sus hijos a escondidas para que no los discriminen!!! de locos!!! Que se acostumbren a tu hábitos también, que te respeten a vos como vos a ellos. Quién te dice, los niños son muy plásticos, a lo mejor contagiás y todo. Besotes!!!!!
Hola Tres arándonos, ¡como te entiendo!
ResponderEliminarA mi al principio nos pasaba lo mismo que a ti (tengo 3 niños, una de siete, otra de 5 y el peque de un añito).
El caso es que eso no se consigue de la noche a la mañana, y es dificil y te miran con cara rara, pero te digo lo que hicimos nosotros:
-Decirles a los padres que no quieres que le den esas cosas a los niños (te aviso, vas a ser la rara y te van a mirar como un bicho raro). Supongo que al menos te pedirán permiso antes de darle nada a tu hija ¿no?
-Llévala al parque, al patio, a dónde recién merendada.
-Si sacan gominolas o similar, en vez de decirle a tu hijo/a que no, le digo que ellos tienen eso, pero que tú le has traido... Como alternativa le llevaba cereales que le gustaran (con miel, con un poco de chocolate, tortitas de maiz, etc...) y zumos que siempre es mejor que comiesen gominolas, refrescos u otras cosas.
-Poco a poco, ir acostumbrando al hijo/s que no pueden comer lo que le den en el parque, que te tiene que pedir permiso para eso, y que sepan, que igual el fin de semana les puedes dejar, pero no entre semana (yo lo he conseguido, machacando el tema cuando ya tienen unos 4 años, antes dificil y siempre hay alguna vez que...).
El tema es dificil, pero espero que mi experiencia te sirva de algo.
Por cierto, me ha hecho mucha ilusión ver a otra madre con un blog. Yo tengo uno también, pero distinto al tuyo, de manualidades infantiles, las que hago con mis hijas. Te dejo la dirección por si te quieres pasar:
http://manualidadesconmishijas.blogspot.com.es/
Ya nos irás contando al final que has hecho y como te ha ido. Me interesa el tema que ahora viene esa etapa con el pequeño y con padres nuevos. Y siempre está bien aprender cosas nuevas.
Un beso, Naikari
¡Hola! ¡Qué difícil es gestionar estas situaciones!
ResponderEliminarNosotros hacemos algunas de las cosas que ya te han comentado. Merendamos siempre antes de salir de casa y siempre intento explicarle a mi hijo que nosotros no comemos esas cosas porque no son buenas. Tengo una amiga que se dan momentos de "la orgía del dulce" ella siempre le ofrece una galleta para que al menos coma algo especial como los demás ;-).
Sé que soy "la rara" pero prefiero serlo antes de que mi hijo con dos años se infle a porquerías.
Para mí es mucha tensión tener que estar pendiente de si le ofrecen algo que prefiero que no coma, así que, desde hace un tiempo, intento relacionarme con otras familias que tampoco le dan esas cosas a sus hijos y he dejado de ir al lugar donde iba antes.
También puedes prepararle galletas caseras con harina de algarroba, nosotros preparamos unas veganas muy ricas y como parecen de chocolate se las come tan contento.
A ver si nos cuentas cómo va.
Un abrazo
Nosotros tratamos de llegar a acuerdos a la hora de comer chuches y sobre todo ofrecer otras alternativas y tratar de no dar ejemplo comiéndolas. En el caso de los amiguitos es complicado pero hemos decidido que, aunque a veces nos miren como bichos raros o les pueda parecer mal, cuando los adultos decimos que no, es que no y punto y si las otras familias no lo quieren entender es su problema. ¡No te imaginas lo que te entendemos!
ResponderEliminarTe entiendo, no con lo de los niños, pero a mi también me cuesta que la gente entienda que apenas como azúcar y no me gusta nada lo preparado. Creo que es sencillo, no des explicaciones simplemente habla con ellos y les dices que por favor tu hija no puede comer dulces. Y les pides compresión y respeto. Si un padre no lo entiende, creo que es mejor que no esté en tu entorno.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, es difícil sí, lo del azúcar muy poca gente lo entiende, lo sé por experiencia propia.
EliminarEste comentario es para Edurne, que me dejó un mensaje pero no puedo escribirle por email:
ResponderEliminarQuerida Edurne,
muchas gracias por tu comentario, la verdad es que me parece muy sensato todo lo que has escrito y tienes toda la razón, ahora no es tan difícil, yo aún no estoy en la fase adolescente... eso sí que debe de ser complicado.
Un abrazo y gracias por leerme y escribirme.