Batido vegano de granadilla con película para acompañar

La semana pasada recibí un curioso regalo. Se trataba de una extraña (y enorme) fruta recién llegada de la República Dominicana en la maleta de una amiga, que no tenía ni la menor idea de qué podía ser. Ella la había recibido a su vez de unos amigos dominicanos. Ninguna de las dos fuimos capaces de darle un nombre, y si no fuera por Google hoy todavía no sabría que se trataba de una granadilla gigante, o Passiflora quadrangularis. 

Batido de granadilla gigante

Cuando la abrimos nos encontramos con un montón de semillas y un olor rarísimo. Si dijera que olía bien mentiría. 


Tras probarla decidí que aquello no era comestible por sí solo. Me recordaba a un pepino... nada que ver con la imagen dulce y suntuosa que los europeos tenemos de las frutas exóticas. Tras realizar una rápida búsqueda de recetas (granadilla en una mano, ratón en la otra) descubrí que esta fruta puede ser consumida entera, semillas incluidas, en batidos, ensaladas o como una verdura.

Esta es la fruta que me regalaron. Fuente de la imagen: ''Passiflora quadrangularis'' One and a half giant granadillas, showing the edible pulp in which the seeds are embedded. Picture taken by Fibonacci. From en:Image:Badea.jpg

Y así nació la improvisada receta del batido vegano de granadilla gigante.

Mientras escribía esta entrada me llegó un correo de doña Canela, que me informaba de que a partir de ahora los miércoles toca ver películas que hagan juego con una receta, algo que ha bautizado con el título "Cine Cena Copa" o CCC (como los cursos).

Y me quedé pensando qué película podría acompañar a un batido de passiflora quadrangularis. Me encanta el cine, a pesar de las pocas películas que veo últimamente. 

Al final me decidí por la más absurda de todas, pensando que muy pocos habrán visto y que se llama Tuerkisch fuer Anfaenger o Turco para principiantes (2012). Se trata de una película alemana basada en la serie homónima, ligera y veraniega. La serie cuenta en clave de humor la vida de una familia que vive en Berlín, formada por una madre hippy, activista ecologista y liberal llamada Doris Schneider (¿será que me siento identificada?) que se casa con un policía turco musulmán, Metin Öztürk, ambos con un hijo y una hija adolescentes de matrimonios anteriores. Los "retoños" de ambas partes se ven obligados a convivir juntos en la misma casa, lo cual da lugar a muchas situaciones incómodas y a su vez muy graciosas. La película es como un resumen de la serie, y en ella ambas familias se conocen tras un accidente de avión que los deja atrapados en una isla desierta. A pesar de estar en alemán creo que es posible verla con subtítulos. Quien conozca Berlín y la cultura turcoalemana se reirá a gusto con esta película. Reconozco que no es una obra de arte de la cinematografía, pero no podemos ser siempre serios y estirados... quien busque algo un poco más fino siempre puede optar por The Best Exotic Marigold Hotel. Entrañable y ambientada en la India, ideal para una tarde perezosa de verano.

Una película para acompañar al batido, de humor fácil pero muy "berlinés". Fuente de la imagen: http://outnow.ch/

Y por último la receta...

BATIDO VEGANO DE GRANADILLA GIGANTE

Para una noche de cine bajo las estrellas soñando con paraísos lejanos, (o mientras escucháis Hawai Bombai en la bañera)

INGREDIENTES:

• 1 granadilla gigante, pelada, no es necesario quitar las semillas
• 1/2 l de leche de arroz
• Sirope de arroz (o miel, pero entonces ya no es vegano) al gusto
• Canela
• Vainilla en polvo

Mezclarlo todo en la batidora y servir bien frío. Si lo dejáis en la nevera hasta el día siguiente habrá que añadir agua, porque se vuelve espeso.

Y para picar nada como unos pinchitos de frutas exóticas, o de melón y sandía que son también veraniegos pero más sostenibles y cercanos a nosotros.

Supongo que los que me leáis desde España no tendréis ninguna granadilla a mano para probar esta receta, pero al menos podéis mirar alguna de las recomendaciones cinematográficas e imaginar el sonido de las olas y el viento entre los cocoteros...