Piruletas de agar sin azúcar

Hace tiempo os contaba mis problemas con los amigos de Arandanita y la comida poco sana. Lo que he notado con el paso del tiempo es que cada vez es más difícil evitar que entren golosinas en casa (lo sé, lo sé, qué sorpresa...). Es increíble la cantidad de gente que se las ofrece con la mejor voluntad del mundo (me pasa con las cajeras del supermercado, con monitoras infantiles, ¡e incluso en el banco!).  Por si fuera poco, un día viendo sus dibujos animados preferidos se pasaron medio capítulo haciendo alabanzas de las piruletas. Oh, no. Parece mentira, pero cualquier cosa que salga en unos dibujos animados se vuelve de pronto fantástica (una se pregunta por qué no hacen dibujos donde se lo pasen bomba tocando el piano y leyendo a Tolstoi). Resultado:

- Mamá, ¿qué es una piruleta?
- Mamá, yo quiero una piruleta.
- ¿Hay piruletas de limón? ¿Y de fresa? Yo quiero una piruleta rosa.
- Mamá, ¿podemos comprar una piruleta?
- (Y así hasta el infinito).

¡Noooo! Odio el azúcar. Odio las golosinas baratas y llenas de colorantes. Pero comprendo que negar una piruleta a un niño que está rodeado de ellas es muy MUY mala idea y una receta segura para que los caramelos se conviertan en ese oscuro objeto de deseo. Así que, aprovechando que Arandanita es todavía una renacuaja, decidí darle el cambiazo con piruletas caseras, sin nada de azúcar y totalmente naturales, hechas mayoritariamente con fruta triturada. Y el resultado fue éste:

receta de piruletas sin azucar
Piruleta parece, azúcar no es.

¿Lo mejor de todo? Que me ayudó a hacerlas, porque es tremendamente fácil, y con ello se volvieron todavía más atractivas. ¿Lo peor? Tampoco es que sea una gran desventaja, pero sí, son diferentes de las piruletas normales. Dado que están hechas con agar agar, que es gelatina vegetal, su textura es más parecida a la de una gominola. Por el momento no he encontrado la manera de hacer piruletas de consistencia dura sin usar azúcar o algún otro edulcorante.

RECETA PARA LAS PIRULETAS SIN AZÚCAR DE FRUTA 100%

Utensilios necesarios:

Necesitaremos un molde especial para piruletas y suficientes palitos. El mío es de LIDL (lo suelen tener una vez al año), aunque se consiguen también por internet, éste por ejemplo es una buena opción. Aunque no lo he probado, si no tienes el molde especial puedes probar a llenar una bandeja con el líquido y una vez endurecido cortarlo con un cortapastas, para después clavarle el palito manualmente.

Ingredientes:

  • 100 ml de puré de cualquier fruta madura (yo usé ciruelas, que son bastante dulces y tienden a espesar con facilidad)
  • Un chorrito de zumo de limón
  • 2 cucharaditas de agar agar (gelatina vegetal)

Cómo se hace:

  • En primer lugar conviene descubrir la capacidad de nuestro molde para piruletas, ya que suele ser necesaria muy poca cantidad para llenarlo. Para ello puedes llenar el molde de agua y verterla en una jarra de medir tipo Pyrex o similar. En mi caso era más o menos medio vaso (unos 100 ml).
  • A continuación pelamos y deshuesamos la fruta, la pasamos por la batidora y la ponemos en un cazo a fuego muy lento, destapado para que pierda agua. 
  • Mientras empieza a hervir disolvemos el agar agar en un par de cucharadas de puré de frutas (en frío).
  • Cuando el puré adquiera una consistencia similar a la mermelada añadimos el polvo de agar agar. La cantidad dependerá de lo que ponga en el envase, yo les puse dos cucharadas de café por 100 ml de líquido. Cuanto más agar le pongas, más firmes quedarán.
  • Apartamos el puré de frutas del fuego, disolvemos bien el polvo y añadimos un chorrito de limón.
  • Vertemos la mezcla en los moldes.
  • Dejamos que se enfríe, si es posible entre seis y ocho horas. Se puede meter en el frigorífico para que quede un poco más firme, sobre todo en verano.


Lo más difícil es esperar a que se enfríen.

Por cierto, a menudo la gente me pregunta por qué no quiero que mi hija tome azúcar (si puedo evitarlo). Normalmente contesto que es para evitar las caries y la hiperactividad infantil, porque es algo que la gente comprende y evita que piensen que soy una chalada. Aparte de la salud dental, hay otros motivos  para limitar nuestro consumo de azúcar, y sobre ello se han escrito ya muchos libros. Quien tenga interés por saber más puede leerse por ejemplo La adicción al azúcar o Cuidado con el azúcar.

A nosotros nos encantaron estas piruletas, ¡y lo mejor de todo es que pude dejar que Arandanita se hinchara a piruletas sin ningún remordimiento! Creo que ha tenido bastante para una temporadita... mientras tanto seguiré investigando nuevas recetas de golosinas caseras. Por cierto, si no tienes palitos puedes usar la misma receta para hacer gominolas. ¿Qué os parece? ¿Os animáis a hacer piruletas sanas con vuestros niños?

Comentarios

  1. Pues es muy buena idea para evitar el azúcar!
    Besos

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  2. ¡Qué opción más buena!
    Mi dentista siempre ha dicho que tal cual entraban sus niños en casa con bolsas de chucherías de los cumpleaños iban directas a la basura, que se cargan la dentadura muchísimo más de lo que creemos...
    Por no hablar del resto desventajas.
    ¡Un besote y gracias por la idea!

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    1. Pues sí, el nuestro también estaría de acuerdo. Besos a ti también.

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  3. Yo también quiero una piruleta de las tuyas!! Me ha encantado la idea y aún más que las hayas hecho con tu hija, así ella también puede relacionarlo con algo divertido y seguro que cuando sea mayor lo recordará con esa nostalgia agradable de las cosas buenas de la niñez. Quizás sea un poco de manipulación, pero mejor una manipulación así que el crear un vínculo positivo con las chucherías porqueriosas (al final siempre acabamos manipulando a los niños, pero también es una cuestión de interpretación. Transmitir los valores que nos parecen importantes y beneficiosos, es esto manipulación?).
    Besos!

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    1. Manipular o no manipular... yo creo que es lo mismo que educar, si no, también podría decirse que están manipulando a los niños al enseñarles ciertas cosas sí y otras no en el colegio, pero si en este caso se puede llamar educación supongo que en el mío también :)

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  4. Pero qué apañada eres, Arándana. Ojalá pudiera yo eliminar el andia por azúcar que me posee cada dos por tres. A mis hijos les doy muy poca guarrada pero yo caigo en la tentación una y otra vez. :(

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    1. Ayayay :) Te voy a tener que enviar un cargamento de piruletas a ver si sales del vicio :)))) Lástima que resistan tan mal los cambios de temperatura, que si no ...

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  5. Mis hijos no son de chuches y no les van las gelatinas ni las gominolas mucho. Pero esta receta mola!,y si no les gusta a ellos, seguro que a mi si! ;)

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