El Reiki y yo

Hoy hace seis meses que me convertí en "maestra" de Reiki. Fue mi regalo de Reyes de mí para mí. Reconozco que es un regalo muy raro y que no es para todo el mundo, y cabe la posibilidad de que algunos me tachen de estar majareta. Pero a mí me hizo la mar de feliz. ¡Tanto, que ya tenía ganas de contárselo a alguien!

Los Cinco Principios del Reiki

Para quien no lo sepa, el Reiki es una técnica para reducir el estrés (es la definición más inocua que he encontrado) que fue inventada por el japonés Mikao Usui. Consiste en colocar las manos sobre la persona u objeto a tratar y visualizar cómo canalizamos la energía universal a través de ellas. 



El Reiki está al alcance de todos, cualquiera puede usarlo si lo desea y es muy sencillo. Basta con poner las manos encima del objetivo (tocándolo o sin tocarlo) e imaginar cómo fluye la energía universal a través de ellas. El nombre que le demos a esa energía es totalmente irrelevante. Hay quien le dice energía universal, los cristianos se imaginan el amor de Dios, o la podemos llamar energía cuántica del universo, cada cual a su manera, porque a la energía le da absolutamente igual el nombre que los mortales le pongamos. El Reiki NO es una religión y es compatible con cualquier religión, que yo sepa.

Como es energía no está limitado por el tiempo ni el espacio, de modo que se puede enviar Reiki a situaciones futuras (por ejemplo, a mi futura entrevista de trabajo), a situaciones pasadas (aquel día en que se murió mi mascota cuando tenía nueve años) o a personas que se encuentran en la otra punta del mundo (aunque para ello se necesita su conocimiento y consentimiento. Está prohibido enviar Reiki a gente que no lo haya pedido).

Para hacer que funcione mejor podemos intentar fomentar nuestras prácticas espirituales. Lo más sencillo es meditar a diario, para los cristianos probablemente el rezo o la contemplación. Existen cinco principios del Reiki, sobre los que se aconseja meditar. A mí me gustan mucho, me parecen muy sencillos y efectivos. Los tenéis en la primera imagen. Cortesía de la Maestra Arándana.

Generalmente es necesaria la iniciación al Reiki por parte de un maestro, y por convención existen varios niveles de iniciación o "sintonización". Existen tres niveles y el último es la maestría (Maestro de Reiki o Shinpiden). Algunos individuos utilizan la excusa de las iniciaciones para ganar dinero a espuertas, cobrando por ellas sumas desorbitadas. Comprendo que las personas tenemos que comer, y que en esta vida trabajar gratis es un lujo que sólo podemos permitirnos las blogueras (ja, ja). Pero cobrar en exceso por las iniciaciones al Reiki, en mi opinión, va en contra de la filosofía del fundador, ya que era monje budista (los budistas son partidarios del desapego de lo material porque entorpece nuestro desarrollo personal). En cualquier caso, Mikao Usui no recibió la iniciación al Reiki de nadie. Nota: aunque recibí hace unos meses la iniciación al grado de maestría, no me siento aún a ese nivel. A lo mejor dentro de un año o dos... yo no tengo ninguna prisa.

¿Para qué se usa el Reiki? Se recomienda usarlo como terapia COMPLEMENTARIA, especialmente para reducir el estrés. No está probado que el Reiki pueda curar nada, así que por favor, que nadie vaya corriendo a tirar sus medicinas por la pila a causa de este artículo (no me responsabilizo de ello). He leído muchos casos de gente que pensó que podría curar a algún ser querido de una enfermedad grave con el Reiki, y no funcionó. Sólo sirvió para que el reikista cayera en una profunda depresión. Probablemente la misión del Reiki no sea cambiar el destino de cada uno, sino ayudarnos a afrontar y ACEPTAR los obstáculos con mejor ánimo, con estoicismo y sin ansiedad. Esta es mi visión sobre el tema, puede que otros tengan opiniones distintas. Cada cual, a su manera.

Yo lo uso conmigo misma, me sirve como forma de relajación y meditación diaria. La gente de mi entorno no está muy abierta a probarlo, pero a los pocos "afortunados" que me han dejado practicar con ellos parece que les gustó. Excepto quizás a mi gato. Pero es que a mi gato no le gusta nada. Es un caso aparte.

Aparte de usar el Reiki para tranquilizarme cuando estoy de los nervios (ocurre más a menudo de lo que podéis imaginar, mi vida no es tan Zen como lo parece), viene bien cuando no puedes dormir por la noche o te encuentras atrapada en un atasco, o con ganas de arrancarle la cabeza a algún imbécil (ups). En ese caso es más conveniente imaginar que la energía y la paz del Reiki te inundan. Arrancar cabezas está desaconsejado en la filosofía budista.

Otros usos prácticos del Reiki en situaciones banales y diarias (lo siento, pero son mis preferidas, porque ocurren mil veces cada día):

• Enviar Reiki a un niño hiperactivo que está a punto de saltar y colgarse de la lámpara de araña,
• A veces me imagino que el Reiki envuelve a mi coche / bici cuando los dejo aparcados, para que no me los roben o dañen,
• O envío energía positiva por delante de mí cuando voy hacia la cola en una tienda... para que la cola fluya rápido y sin problemas (producto sin código de barras, hablo de ti),
• También viene bien para enviar buenas vibraciones a la comida que acabamos de cocinar. Es genial para hacer que la masa del pan y la pizza suban maravillosamente.

Si a alguien le interesa saber más sobre el tema, mi libro preferido es "Reiki, the essential guide", pero está en inglés. En español me han recomendado "Reiki esencial", estoy esperando a ver si lo encuentro en la biblioteca. Otro del que hablan muy bien es el "Libro completo de Reiki", de J.M. Jiménez Solana.

Libros recomendados sobre Reiki (yo tengo el primero y The Reiki Bible)

Puede ser que penséis que me he vuelto loca, pero bueno, ya sabíais que era rara desde el principio. Para mí todo esto es muy interesante, muy útil y me hace feliz. Si queréis podéis contarme en los comentarios qué hacéis vosotros cuando estáis de los nervios, ¿tenéis alguna técnica especial que os ayude? ¿Quizás pasear, cantar, meditar? Me interesan mucho vuestras ideas.